Viernes 12 de Enero de 2024, ya se han pasado las navidades y vamos a estrenar el año viajando a un nuevo destino de Iberia: la deslumbrante joya de Qatar, Doha. Situada en una pequeña península del Golfo Pérsico, Doha, con una población cercana a los 2 millones de habitantes, un país con enormes reservas de petróleo y gas que le han llevado a ser uno de los países más ricos del mundo.
En la imagen alguno de los países que se encuentran dentro del Golfo Pérsico, entre ellos Qatar, nuestro destino.
A las 8,30 despegamos hacia Doha donde tomamos tierra a las 17 horas local (2 más que en España). Nos hacen un Upgrade y vamos como auténticos marajás. En 6 horas exactas tomamos tierra en el aeropuerto internacional de Hamad.
Pasamos muy rápidos control de pasaportes, un taxi y para el hotel. En este aeropuerto únicamente se pueden coger taxis que son los oficiales del gobierno, no están permitidos los UBER, estos solo se pueden coger para ir al aeropuerto pero no para salir de él.
En unos 20 minutos recorremos los 20 kms que nos separan para llegar a nuestro hotel, el Qabila Westbay Hotel donde nos alojaremos las próximas 3 noches. Se encuentra situado en la zona de West Bay, en pleno centro financiero, el skyline por excelencia de la ciudad. Habitación muy grande, muy limpia, con mucha luz y vistas al mar, aunque creemos que de las 5 estrellas le sobra una.
Dejamos todo y cogemos un UBER que nos lleva hasta el centro al Zoco Souq Waqif el principal destino turístico de Qatar. Muebles, telas, perfumes, joyas son parte de la oferta que se puede encontrar en este zoco y ni que decir que una gran variedad de restaurantes y teterías.
Se creó a finales del XIX como punto de reunión de beduinos y comerciantes locales para el comercio de ganado. En el 2006 comienza la reforma que dura un par de años derruyendo los edificios levantados después de la década de los 50. Todo está impecable, limpio, impoluto, pero da la sensación de estar paseando por un decorado de cartón-piedra.
Cenamos en el Desert Rose un Mixed Cold Mezze Platter, todo riquísimo; una pena que tuvimos que hacerlo con agua, aquí eso de tomarte una cervecita o un vinito para comer, na de na.
A dos pasos del restaurante, donde comienza La Corniche, se encuentra el monumento a La Perla, la industria más importante en la historia de Qatar antes de descubrir sus reservas de gas y petróleo.
El espectacular y llamativo Skyline, probablemente sea uno de los más llamativos a nivel mundial.
En un principio nuestra idea era coger un taxi para ir al hotel, pero nos liamos a andar y nos pateamos toda La Corniche. Cuanto más te acercabas, más bonita era.
La Corniche, un paseo marítimo con forma de media luna y 7 kilómetros de longitud ofrece las mejores vistas sobre el moderno horizonte urbano de la ciudad.
Llegando ya a nuestro hotel, una maravillosa delicia pasear por este paseo y poder disfrutar de este paisaje urbano.
Han sido sólo unas 4 horas, pero las hemos aprovechado un montón. Mañana más y a tope que tenemos un programa muy extenso para estos días.
Sábado día 13, hemos dormido como lirones, ayer fue un día de madrugar mucho, luego el viaje y seguido la caminata nocturna, motivo por el cual caímos muertos a la cama.
Desayunamos fuerte y nos ponemos en marcha, vamos directamente hasta la estación de metro que tenemos más cercana (unos 15 minutos a pie) la DECC.
Sacamos nuestro billete Standard Day Pass, coste de 6 Riales Qatarís (1,50 €), no tiene límite de viajes, una maravilla. Luego explicaré detalladamente cómo funciona el metro.
Como no podía ser de otra forma, el metro está impecable, funciona de maravilla y cada 2 o 3 minutos pasa uno.
Nuestra primera parada del día la hacemos en la estación de Msheireb, estación en la que conectan las tres líneas actuales, la línea verde, roja y amarilla.
Caminamos un poco y nos encontramos con este tren el Msheireb TRAM, que circula por un circuito cerrado de 2 kms y 9 paradas, lo que facilita el acceso a distintas zonas de este distrito de la ciudad.
Paseamos tranquilamente por toda la zona hasta llegar al Souq Waqif y alrededores que a estas horas se encuentra mucho más tranquilo y sin el agobio de tanta gente como hay por las tardes.
De camino al Museo Nacional de Qatar nos encontramos con otros pequeños autobuses totalmente gratuitos que recorren toda la zona. Los distinguirás por su color granate con una gran M de Metrolink. Funcionan súper bien y te ahorran muchos pateos.
Diseñado por el arquitecto Jean Nouvel, el Museo Nacional de Qatar se inspira y recrea las formaciones de cristal naturales conocidas como "rosas del desierto".
Volvemos a coger el Metrolink y nos apeamos en la entrada del MIA Park, punto en el que se encuentra el Museo de Arte Islámico.
Museo de Arte Islámico, construido en el año 2003-2008, está dedicado al arte islámico desde el siglo VII al XIX en el que se incluyen diversos objetos desde manuscritos hasta textiles.
MIA Park, en este parque te encontrarás con bastantes carros tipo golf que te llevan de un lugar a otro que tú quieras de una forma totalmente gratuita.
Desde este punto, el MIA Park Coffe Shop, se disfruta de las mejores vistas del skyline de la ciudad.
Conocido también como el East Mound-Skyline View, es un parque con un bonito paseo marítimo, con inmejorables vistas del horizonte urbano y punto ideal para ver un atardecer.
Aprovechamos para tomarnos un refresco, volvemos a coger otro carro que nos saca hasta la puerta de entrada y ahí enganchamos con el Metrolink que nos lleva hasta la parada de metro de National Museum.
Línea amarilla hasta la estación Al Aziziyah Metro Station. En este punto se encuentra el Mall Villaggio, centro comercial que destaca entre todos por estar inspirado en las calles de Venecia.
Entre las muchas calles repletas de tiendas de lujo no sólo se puede pasear, sino que además puedes disfrutar de un paseo por los canales a bordo de una góndola al más puro estilo veneciano. Eso sí, no cantan el "O sole mío"
Si algo nos llama poderosamente la atención es el cielo, el cielo de las zonas comunes y pasillos del Villaggio está decorado con un cielo pintado, que dota al espacio la sensación de estar al aire libre, la realidad supera la ficción, increíble.
En la misma zona se encuentra la Aspire Zona, también conocida como Doha Sports City. En el corazón del complejo se encuentra el Estadio Khalifa, sede oficial de la selección de futbol de Qatar.
La Aspire Tower es un rascacielos construido en el 2006, como símbolo de la celebración de los juegos asiáticos. En la cúspide se instaló la antorcha olímpica, por lo que este edificio también es conocido como la Antorcha de Doha. Tiene una altura de 300 metros y 51 plantas con vistas panorámicas 360º.
Este edificio alberga un emblemático hotel de lujo, el The Torch Tower y el Three Sixty un restaurante ubicado en la planta 47, el único restaurante giratorio de Doha.
En el piso 21 se encuentra el restaurante Tea Garden y justo debajo en un saliente de la torre se encuentra una estupenda piscina con borde infinito.
Hemos visto el atardecer desde las alturas, desde el punto más alto de Doha y de nuevo al metro para ir hasta el hotel a descansar un poco antes de volver al Souq para la cena.
La cena la hacemos en el restaurante Parisa Souq Waqif, un precioso restaurante donde degustar auténticas delicias persas. Compartimos dos platos uno a base de pollo y el otro de cordero, los dos exquisitos, buenas raciones y buen servicio. Precio razonable, no es barato pero tampoco caro.
Fascinantes interiores combinan obras de arte persa pintadas a mano, mosaicos, candelabros ornamentados y miles de pequeños espejos.
Cuando llegamos al hotel a Montse su reloj le marca que hemos caminado algo más de 23 kilómetros, creo que por hoy es más que suficiente.
En la imagen superior el Tornado Tower, evoca la forma de un tornado en el desierto y lo hace gracias a una escultura de luz cinética realizada por Thomas Emde.
Domingo 14, desayuno y al metro que ya somos expertos en su manejo. En el día de hoy nos desplazamos en la línea verde hasta la parada Education City. Bien caminando, bien en tranvía (gratuito) podrás explorar todo el campus, subiendo y bajando en aquellos puntos que más te interesen.
Comenzamos nuestra visita por la Qatar University que con sus 42.000 metros cuadrados y un espacio interior útil de 25.900, alberga a las bibliotecas Nacional, Pública y de la Universidad de Doha.
La biblioteca está concebida como una única sala de enormes dimensiones, también alberga la Colección del Patrimonio, compuesta por textos y manuscritos relacionados con la civilización árabe-islámica.
La Colección Patrimonial está ubicada en el centro de la biblioteca en un espacio excavado de 6 metros de profundidad, revestido de travertino beige.
Foto inferior derecha.
Nos detenemos en la Mezquita de Education City, situada en el edificio Minaretein de 35.000 metros cuadrados, es la principal mezquita centrada en la comunidad de Qatar y la región. Cuenta con capacidad para albergar 1.800 fieles en su sala de oración principal y otros 1.000 en su patio exterior.
Cogemos el tranvía y nos detenemos en la parada donde se encuentra el Education City Stadium, también conocido como Qatar Foundation. Con una capacidad de 40.000 espectadores fue, la tercera sede oficial inaugurada para el mundial de futbol 2.022.
Nuevamente metro para acercarnos hasta la última parada (Mall of Qatar) para visitar el mall del mismo nombre. Otro destino de compras y ocio, siendo también el centro comercial más grande del país.
La característica más distintiva de este centro comercial es el "Oasis": un atrio de 30 metros de altura con grandes jardineras de plantas y estructuras de apoyo vivas en forma de árbol. En el centro del Oasis, se encuentra un teatro profesional con un escenario giratorio 360º rodeado por fuentes de agua danzantes.
Es hora de regresar, a las 14 horas tenemos que estar listos para hacer una ruta al desierto y llegar hasta el mar interior de Inland Sea frontera con Arabia Saudí.
A las 14 horas nos ponemos en marcha, 4 flamantes Land Cruiser V8 nos esperan para hacer alguna que otra locura por las dunas del desierto.
A nuestro paso podemos ver una refinería de petróleo que nos dicen es muy pequeña, solo 25 kms de larga, ¡¡Humm!! y ¿cómo serán las grandes?
Nos detenemos en un lugar junto a la carretera donde una buena cantidad de camellos esperan a los turistas para darles una vuelta por alguna que otra duna. Nosotros nos quedamos a la espera mientras hacemos alguna que otra fotillo.
Poco a poco nos vamos adentrando en el desierto y subiendo y bajando dunas como locos. El paisaje es maravilloso, desierto y a nuestra izquierda el Golfo Pérsico.
En este corto video se pude apreciar cómo vamos bajando por estas gigantescas dunas del desierto arábigo, una auténtica locura. Eso sí, los pilotos son auténticos expertos en moverse por estos terrenos.
Otra parada junto a Sealine Beach, Mesaieed, una de las principales zonas de complejos turísticos de playa en Qatar.
Unos auténticos crack, igual bajan hacia delante que hacia atrás, no se lo piensan dos veces.
Sobre las 4 de la tarde llegamos al Inland Sea, al fondo tenemos Arabia Saudí. Aunque le llaman el mar interior, en realidad está abierto por un estrecho conducto desde el Golfo Pérsico.
El Mar Interior, también conocido como Khor Al Adaid, es la entrada al Mar del Golfo Pérsico, situado en la frontera entre Qatar y Arabia Saudí. Debido a las escasas precipitaciones y las altas temperaturas, el agua del mar es más salada que el agua de la bahía adyacente.
Disfrutamos de un bonito atardecer desde lo alto de una duna y con un ¡¡OHHH!! y una sonrisa en los labios regresamos a casa.
La Torre de Doha, (amarilla del fondo), también conocida como Burj Doha, es uno de los rascacielos más representativos de la ciudad. Al caer la noche son las luces doradas las que atraen la atención de los que por ahí pasamos. Tiene 46 plantas y se ilumina gracias a 3.625 luminarias LED hechas a medida.
Hoy cenamos en el Restaurante Damasca One, también en el Souq. Mucha cantidad, bien de precio y mucha agua ¡jajaja!. Un lugar con una terraza ideal, tranquila y excelente ubicación.
Lunes día 15, último día en Qatar, así que vamos a desayunar, preparar equipaje y salir zumbando a recorrer lo que todavía tenemos en agenda. Hacemos el check out, dejamos las maletas en consigna y nos ponemos en marcha.
Antes de dejar la habitación una foto de nuestras vistas que mantendremos en el recuerdo.
Pillamos nuevamente el metro y nos vamos hasta la última estación de la línea roja, Lusail QNB. La parada te deja en las puertas del Estadio Lusail, un recinto multiusos con capacidad para 88.966 personas, aunque es utilizado principalmente para partidos de fútbol. Fue una de las sedes del mundial 2.022.
Empezamos a caminar a lo largo del Boulevard, donde actualmente se encuentran a ambos lados casetas de los países participantes en la Asian Cup de futbol.
Al fondo tenemos las Lusail Towers, un proyecto de Foster+Partners' que consta de cuatro torres, dos de 70 pisos y otras dos de 50.
Las Lusail Towers y varios decorados de diversos países participantes en la Asian Cup.
Cruzamos la Al Sa'ad Plaza y llegamos al Lusail Boulevard Cornish donde nos encontramos con el típico I love Qatar.
Varias instantáneas de nuestro paseo por el Boulevard Cornish.
Llegamos al majestuoso Place Vendome, un impresionante centro comercial inspirado en la arquitectura clásica francesa. En el centro su hermosa fuente bailarina que ponen en funcionamiento en las horas en punto y en las medias.
Aquí tenemos las fuentes bailarinas en plena acción. El único problema que vimos es que duran escasos 5 minutos.
Hermoso diseño del Velero Hotel.
Raffles Doha and Fairmont Doha, estos dos hoteles ocupan dos torres entrelazadas, tienen nada menos que 40 plantas y su estructura forma una cimitarra, emblema nacional de Qatar.
En este punto cogemos nuevamente el metro hasta Legtaifiya para visitar The Pearl.
The Pearl es una isla artificial a la orilla del famoso distrito de West Bay. Otro bus de Metrolink nos lleva hasta Qanat Quartier una pequeña Venecia del estado de Qatar.
Qanat Quartier es una comunidad privada y pintoresca donde el encanto veneciano se combina con la elegancia árabe. Destacan sus pintorescas casas de colores pasteles, plazas, calles, así como los canales que conectan cada uno de estos rincones.
La pequeña Venecia es otra muestra más de la opulencia, en algunos lugares, que tienen Doha y Qatar, y que sus petrodólares pueden comprar casi cualquier cosa.
Puerto deportivo de Porto Arabia con una capacidad de 400 barcos y una zona especial para yates de 60 metros (como es el nuestro, jajaja). En el centro hay una isla donde se encuentra un Four Seasons.
El nombre de La Perla fue elegido porque la isla fue construida donde anteriormente se practicaba el buceo o búsqueda de perlas. Qatar fue uno de los principales comerciantes de perlas en Asia antes de que las perlas japonesas se volvieran más baratas y asequibles justo antes de la bonanza petrolera.
Volvemos a coger el Metrolink que nos deja nuevamente en la parada de metro. Una parada más y nos bajamos en la estación de Katara donde vamos a pasear por la zona denominada Katara Cultural Village, un pequeño pueblo construido que ofrece una gran actividad cultural y de ocio.
Anfiteatro de Katara de estilo griego clásico refleja influencias islámicas, especialmente en sus entradas arqueadas. Tiene capacidad para 5.000 espectadores y ofrece unas maravillosas vistas del mar por un lado y el pueblo cultural por otro.
Skyline de West Bay visto desde el Anfiteatro de Katara Village.
Katara es un pueblo cultural con estilo propio que se sitúa entre el flamante distrito financiero de West Bay y las torres en forma de media luna del barrio residencial The Pearl. Rodeado por una amplísima playa a un lado y por las colinas Katara Hills al otro, Katara es el sitio preferido en Doha para el arte, la cultura y la gastronomía.
La noche nos cae encima y ponemos rumbo de nuevo al hotel, descansar y volver de nuevo al zoco a cenar.
Una vez más volvemos a cenar al Damasca One, ayer nos gustó su terracita y hoy decidimos volver de nuevo a cenar ahí. Restaurante de sabores sirios, muestra las ricas tradiciones culinarias y las diversas influencias del país.
Una vez más cenamos muy a gusto, con estupendas raciones y un rico Lemon Mint.
En nuestro último paseo por el Zouq nos encontramos con un espectáculo/exhibición de auténticos caballos árabes. Es un mundo que desconozco, pero puedo decir que los caballos eran auténticas preciosidades, como quiero pensar que sus precios.
Regresamos al hotel, cambio de ropa de verano a invierno y UBER al aeropuerto, dejamos nuestro McLaren aparcado en el hall principal y vuelo para Madrid.
A la 1 de la madrugada despegamos para Madrid donde llegamos a las 7,15 am, 2,15 horas más de vuelo que a la ida.
A TENER EN CUENTA
- La moneda es el Rial Catarí y su equivalencia es siempre la misma, 1 euro = 4 Rial
- Precios: la vida no es nada barata, como ejemplo una comida en un restaurante viene a costar una media de unos 25 euros persona.
- Taxis: están muy bien de precio. Un trayecto del aeropuerto al hotel +/- 20 kms, fueron 15 euros.
- UBER: son más baratos, el único problema es que tienes que tener conexión de datos para poder pedirlos. Un trayecto de ida al aeropuerto fueron 9 euros. Como ya dije al principio, UBER no tiene autorización para salir del aeropuerto a la ciudad, sí al revés.
- Tarjeta SIM: una tarjeta de 1 GB, tiene un coste de 10 euros.
- Metro: Es muy fácil, lo mejor es coger un billete para el día. En las máquinas expendedoras pulsas el Standard Day Pass, tiene un coste de 6 Riales (1,5 €) y lo tienes para todo el día con viajes ilimitados.
- Actualmente hay 3 líneas, verde, roja (va al aeropuerto) y amarilla.
- Los trenes tienen 3 tipos de vagones:
- Standard: aquí pueden ir tanto hombres como mujeres.
- Family: solamente pueden ir familias o parejas/matrimonios.
- Gold: su principal atractivo son los sillones que tiene como asientos. Es necesario un billete distinto que tiene un precio de 10 Riales por trayecto. Un absurdo como otro cualquiera. No te metas en el sin billete, si te pillan tendrás que pagar una denuncia.
- Cuidado porque hay muchísima vigilancia y muchos controles dentro de los vagones.
- Funciona a las mil maravillas, es automático, no tiene conductores y cada 3 minutos como máximo tienes uno.
- Donde alojarse: Básicamente hay dos zonas, el Zouq o West Bay. En el Zouq estarás en el mismísimo centro, en todo el meollo, en el West Bay, estarás en la zona financiera donde radican todos los rascacielos. Nosotros los hicimos en el West Bay y de maravilla, quizá más tranquilo que en el centro. Al final es una decisión personal de cada uno. Otra zona es The Pearl, pero ni la nombro porque sus precios son desorbitados.
- WIFI: la mayoría de los sitios tienen, incluido el metro, eso sí, casi siempre es necesario registrarse con un número de teléfono qatarí.
- Seguridad: cien por cien, a cualquier hora del día o de la noche.
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