Alicante-Valencia-Teruel

Jueves 14 de marzo, creo que es la primera vez que hacemos unas vacaciones largas por nuestro maravilloso país, pero por una serie de motivos y sobre todo debido al buen tiempo que estamos teniendo últimamente, nos decidimos por España, un país con mucho que ver.

A media mañana salimos hacia El Campello, localidad costera en la provincia de Alicante en la que nuestra buena amiga Olga tiene un maravilloso apartamento.

Una parada en La Roda para comprar unos Miguelitos, comer un poco y de otro tirón hasta El Campello donde llegamos sobre las 5 de la tarde.

Una vez descargado el coche nos damos un paseo hasta La Bassa de La Reina, y a la vuelta entramos en el restaurante La Masía del Sur, Olga nos ha recomendado encarecidamente que vayamos y que nos tomemos un vino con unas berenjenas con miel de caña. 

Pues llevaba toda la razón del mundo, exquisitas, abundante ración y fenomenal de precio, prometemos volver mañana a a comer.

Viernes 15, sin ninguna prisa comenzamos el día con un buen desayuno. Cogemos nuestros palos de caminar y salimos para hacer la ruta denominada Les Puntes de Gosàlvez. Llegamos hasta la colonia Bonny, punto donde da comienzo el paseo de unos 6,5 kilómetros. La misma transcurre por una zona muy árida y seca debido a las escasas lluvias habidas este año.
A destacar, algunos buenos ejemplares de algarrobos salteados a lo largo del camino y desde lo alto unas buenas vistas del pueblo y costa.

Y como lo prometido es deuda, volvemos a comer a La Masía. Esta vez a destacar las habitas tiernas con chipirones, exquisitas no, lo siguiente, buenísimas.

La tarde la pasamos de paseo por la playa de Muchavista, tontería va, saltito viene y para las 20 horas en casa a cenar en plan tranqui y a dormir.

Sábado 16, hoy es el cumple Ana y no tiene ni idea de que estamos por aquí, la vamos a pillar por sorpresa, ella cree que estamos de vacaciones por las américas. 

Salimos a las 10, 30 de casa y en media hora estamos en la puerta de su casa en Benidorm. Cuando nos ve se lleva el sorpresón del día, no se lo creía que estábamos por allí. Las acompañamos hasta el mercado y seguido a comer al bar de Isabel. La comida muy bien, el precio y detalles un CERO rotundo.

Nos acercamos paseando hasta el Balcón del Mediterráneo. Esta zona está repleta de gente ya que se celebran las fallas, la fiesta valenciana por excelencia.

Regresamos nuevamente a casa, nos despedimos con un hasta mañana ya que volveremos nuevamente y nos vamos para El Campello. 

Hemos pasado un día muy bonito, con un tiempo de verano y lo mejor de todo con una fantástica compañía.

Domingo día 17, para las 10 estamos de nuevo en Benidorm. Nos vamos paseando hasta la playa de Levante que se encuentra hasta arriba de gente y regresamos de nuevo ya que hemos quedado con las Tigras and family para dar un paseo y tomar unos blancos antes de comer y por supuesto celebrar el cumpleaños de Carmen que está y no es broma cada día más guapa.

Una vez todos juntos, un buen paseo de algo más de una hora por la playa y a tomar un par de blancos frescos; tenemos unos 30 grados de temperatura y estamos secos ¡¡jaja!

Llegó la hora de comer, estamos ansiosos de ver esa paella de marisco que nos espera en el Restaurante T-@dor@ y como podemos ver en esta fotografía podemos darle un 10, estaba exquisita, no fue necesario ni fregar la paellera.

En estos tres estómagos agradecidos quedó buena parte de ella ¡jeje!
A las 5 de la tarde dejamos en la estación de bus a las dos tigresas que regresan de nuevo a Madrid, nosotros nos despedimos de Celes y Carmen y volvemos hasta El Campello de nuevo.

Y como somos del norte y hace un calor de la leche, pese a que la temperatura del agua era de 14 grados, para el agua que nos vamos, hemos toreado en peores condiciones.

Lunes 18, el día amanece totalmente nublado, ayer nos fuimos a dormir con 29 grados y hoy hemos amanecido con 8, frío y viento.
Recogemos todo, dejamos el apartamento como si nadie hubiera estado y salimos hacia Benimassot. Una vez allí nos alojamos en el Hotel Rural Valhalla (45€ c/des.), muy bien y con un precioso entorno. Ruidos cero y contaminación cero.
Benimassot es conocido como el Balcón de la Serrella debido a su posición elevada que permite divisar todo el valle y en especial las formaciones rocosas conocidas como Els Frares.

Comemos un bocata en el P3Q, bar que se encuentra en la misma carretera de entrada al pueblo y salimos a dar una pequeña vuelta por los alrededores. Al final han sido 8,5 kilómetros entre cerezos en flor, olivos, almendros y muy buenas vistas. Es más, hemos tenido un sol radiante durante todo el camino.
Cenamos un plato combinado en el mismo lugar y a descansar.

Domingo 19, desayunamos y salimos hacia la localidad de Planes, aparcamos el coche en el centro y comenzamos la ruta denominada "Barranc de l'Encantà" 13,5 kilómetros y algo más de 3,30 horas. Ruta que transcurre entre cientos de cerezos en flor, almendros y olivos, el campo estaba realmente bonito.

Llegamos al primer punto de agua del barranco, el Toll del Gorg del Salt. Un buen lugar para darse un chapuzón, aunque cabe recordar que el agua aquí está bastante fresquita.

Llegamos hasta este desfiladero donde se encuentra esta zona llamada Toll de l'Estret, un lugar con aguas turquesas de difícil descripción.

Todo un espectáculo los cerezos en flor, no te cansas de admirarlos, cuantos más ves, más te gustan. Llegamos de nuevo a Planes, una cerveza, un bocata y el café lo tomamos en el pueblo de Beniali. Hoy nos cenaremos una rica pizza en el mismo lugar, el P3Q.

Miércoles día 20, el día amanece frío, lluvioso y con nieve en las cumbres. estamos indecisos si ir hasta Benisivá (localidad en la que comienza la ruta), o dejarlo para otra ocasión.
Finalmente decidimos intentarlo y nos vamos. En unos 20 minutos estamos allí, llueve con fuerza, nos quedamos en el coche con la esperanza de que pare y a eso de las 11 deja de llover y comienza a salir el sol. Sin pensarlo dos veces, mochila, palos y a caminar.

A lo largo del camino vuelve a llovernos otras 2 ó 3 veces más, en una de ellas nos refugiamos en la Cueva del Moro y de paso aprovechamos para comer un poco. Las vistas que tenemos sobre el Valle de la Gallinera son maravillosas.

Llegamos a la Penya Foradá con el agua pisándonos los talones. Es el lugar más emblemático, paisajístico y representativo del Valle de la Gallinera.

Nada más llegar empieza a llover fuerte, la niebla se nos echa encima y tenemos que resguardarnos como podemos entre las rocas. El frío y el viento son intensos y así pasamos casi media hora hasta que empieza a abrir y salir nuevamente el sol.
Descendemos hasta el pueblo de La Carroja, continuamos hasta Benisivá y damos por terminados estos 10,50 kilómetros en los que hemos pasado por todo tipo de climas.
Comemos algo y nos vamos hacia nuestro próximo destino.

Llegamos a Benichembla, nos alojamos en la preciosa casa de Les Olives, propiedad de una pareja de alemanes "Stephanie y André" (42,60 € c/des.) alojamiento que recomiendo a cualquiera que se acerque por esta localidad y después de dejar todo salimos a dar una vuelta por el pueblo.

El Sindicato, edificio del año 1925 de estilo neoclásico con elementos del rococó y del barroquismo francés.
Cenamos en el único bar que hay en la plaza, el Gat, a base de tapas, alcachofas, boquerones, bollos, lomo, un plato combinado de sepia, una botellita de vino de la zona y todo a un precio más que razonable.

Jueves 21, desayunamos opiparamente, nos despedimos de nuestros anfitriones y salimos hacia Flix que se encuentra a unos 7 kilómetros y punto de partida de la dura etapa que nos espera hoy.
Se trata de la ruta "El Barranco del Infierno" en el Vall de Laguar. Serán algo más de 15 kilómetros con 900 metros de desnivel positivo y la friolera de 6.873 escalones. Sabe Dios como se construyó esto pero lo que si puedo decir es que es increíble. Para hacer este recorrido hemos invertido 4 horas y media, creo que está genial.

Subir escaleras, bajar escaleras, esa la tónica de todo el camino. Recomendable hacerla en un tiempo con temperaturas suaves ya que en verano puede ser tremendo recorrerla.

Cruzaremos tres valles hasta llegar de nuevo a Flix a las 14,30 horas. No me importaría repetirla pero en sentido contrario para ver el recorrido desde otra perspectiva.
Abandonamos la provincia de Alicante y salimos hacia Chulilla en la provincia de Valencia, localidad que dista unos 180 kilómetros desde este punto en el que nos encontramos. Para las 17,30 estamos allí.

Chulilla una pintoresca localidad con un enclave muy especial. Nos alojamos en la casa rural "Ca Tona" (50 € s/des.), situada en la plaza del pueblo y toda la casa para nosotros ya que hasta el sábado no viene más gente. La casa está bien, limpia, correcta pero bastante mejorable.
Una recomendación a la hora de elegir este alojamiento es no hacerlo en fin de semana puesto que no pegarás ojo en toda la noche. El pueblo está masificado de gente y la plaza es el lugar donde se concentra todo el mundo alrededor de sus 4 bares-restaurantes con lo que el ruido está garantizado.
Cenamos de picoteo en el Bar La Baronía y a casa a descansar.

Viernes 22, amanece fresquete y como no tenemos prisa, esperamos a que suba la temperatura para empezar a caminar.
Hoy vamos a hacer la Ruta de Los Pantaneros o Puentes Colgantes pero con algún añadido más (han echado un órdago y les ha salido muy bien, pero no es nada que no hayas visto, nada del otro mundo). Al final serán 15 kms de pateo en vez de los 5 que tiene la de los puentes. Una primera parte transcurre por las Hoces del Río Turia, cruzando éste por medio de dos puentes colgantes como el de la imagen.

Chulilla cuenta con más de 360 vías de escalada entre los 30 y 110 metros. Nos cuentan que es una de las mejores zonas de escalada en España, conocida por su impresionante cañón de roca caliza que forma el río Turia.

Entramos en una segunda parte demasiado aburrida por una pista de gravilla que poco o nada aporta al recorrido. Lo único a destacar el Embalse de Loriguilla.

Dejamos esa aburrida pista, giramos a la izquierda y ya mucho más variado y diverso llegamos hasta las Pinturas Rupestres pertenecientes al periodo epipaleolítico (3500-2000 aC). Complicado el acceso a ellas y difícil de verlas aún estando ahí .

Para las 3 de la tarde estamos de nuevo en Chulilla. Un menú para compartir, una cerveza fresca y fiesta por hoy. Por la tarde nos damos un paseo (como no hemos andado nada..) hasta La Ermita, barrio de Chulilla, cena y cama.

Sábado 23, recogemos todo, liquidamos la cuenta y subimos hasta el Castillo que todavía no lo habíamos hecho, luego una vuelta por el resto del pueblo y nos acercamos hasta el Balneario de Chulilla, cerrado desde hace 6 ó 7 años según nos cuentan. Otra parada en Sot de Chera, nada a destacar y carretera hacia Tronchón, ya en la provincia de Teruel.

Unas naranjas para el camino y desayuno, que por aquí las hay por toneladas.

Parada en Rubielos de Mora, aquí encontrarás una infinidad de casas solariegas y pequeños palacios pertenecientes a los grandes nobles y a destacar el trabajo de la piedra y la forja, sus aleros o escudos.
Aprovechamos para tomarnos un buen café, aunque por la hora que era mejor hubiera sido un buen vino con una tapa de patatas. Ese fin de semana se estaba celebrando la Ruta de la Patata.

La siguiente parada es en Linares de Mora con una bonita panorámica desde su Ermita.

Ahora en Cantavieja, punto neurálgico y capital del Maestrazgo. Esta declarado conjunto histórico artístico y uno de los pueblos más bonitos de España. Posee un casco antiguo muy atractivo, entre cuyos edificios destacan su Ayuntamiento, de estilo gótico, sus casonas blasonadas o la iglesia gótica de San Miguel del siglo XV.
En la imagen su Plaza Porticada de Cristo Rey con la Casa Consistorial y la Casa Bayle. Aprovechamos para comer en el único restaurante que vemos abierto, el Tapavieja y continuamos camino.

Último stop en Iglesuela del Cid. Muchos son los edificios singulares que enriquecen su casco urbano dado que muchos nobles aragoneses eligieron esta localidad como lugar de residencia.

A media tarde hacemos entrada en Tronchón, famoso por su buen queso. Nos alojamos en la Casa Conesa (36 € s/des.), un buen lugar para alojarse.
En la imagen la Ermita de Santa Bárbara.

Paseo hasta la Ermita del Tremedal, charla con sus gentes, cena en el bar Tronchón a base de jamón, queso de Tronchón y una buena ensalada y a descansar.

Domingo día 24, para las 10 ya estamos caminando. Hoy haremos una lineal ida y vuelta hasta Mirambel aprovechando el buen día que hace, serán un total de 20 kilómetros. Cruzamos por el puente medieval en perfecto estado de conservación y continuamos bajando ya que en este sentido es casi todo bajada.

Entramos en Mirambel, considerado también como uno de los pueblos más bonitos de España y la verdad es que no es para menos en 1980 fue declarado Conjunto Histórico Artístico. Un lugar donde parece que el tiempo se haya detenido, tranquilo, ideal para pasear y disfrutar de este maravilloso conjunto medieval.
Imagen del Convento de las Agustinas Ermitañas en la que destacan sus excelentes celosías de madera que revisten los balcones del convento.
 

Conserva en su totalidad su recinto amurallado y sus notables construcciones sin alterar la imagen y el ambiente medieval.
En 1981 se le concede la medalla de Oro del premio Europa Nostra. Ha sido escenario del rodaje de varias películas, a destacar "Tierra y Libertad" de Ken Loach.
Aprovechamos para hacer una visita guiada y sobre las 14,30 emprendemos la vuelta hacia Tronchón donde llegamos sobre las 5 de la tarde.
Nos acercamos hasta la quesería que se encuentra a 100 metros de nuestro alojamiento para comprar un queso y que recomiendo no hacerlo aquí, en cualquier sitio incluido el bar del pueblo es más barato.
 

Cenamos en Casa Matilde, poco que decir de este lugar, un 10 sobre 10. Alubia blanca con perdiz, una buena ensalada, requesón, tarta de queso y una botella de tintorro de la zona. El precio inmejorable y Matilde un encanto de mujer.

Lunes 25, para las 9 abandonamos Tronchón camino de Pitarque. Nos detenemos en Villarluengo para comprar el pan, algo de avituallamiento en el super para nuestra próxima caminata y de paso tomar un café.

Una vez en Pitarque, nos alojamos en La Posada (40 € s/des.), perfecto y Paquita encantadora y charlatana. Cambio de ropaje y a caminar la ruta del nacimiento del Río Pitarque, un monumento natural de esta zona del Maestrazgo.

Llegamos hasta el nacimiento y me quedo un tanto decepcionado ya que pensé se podría ver desde el frente, pero llegado a este punto no hay manera posible de avanzar más. 

A pesar de todo vemos un río de aguas cristalinas y limpias que mana a borbotones de la misma roca a través de dos ojos.
Si bien el verdadero nacimiento del río se encuentra en Fortanete, pero su pequeño caudal desaparece nada más nacer para ver a aflorar en Pitarque de forma caudalosa.

Pasamos un buen rato por la zona y media vuelta para casa otra vez. Un bocata junto a una antigua central eléctrica acondicionada para ello y para las 15,30 terminamos.

La tarde la aprovechamos para acercarnos hasta los Órganos de Montoro, un conjunto natural formado por una gran cantidad de agujas calcáreas de más de 200 metros de altura adosadas al monte. Recibe este nombre por el parecido a los tubos de un órgano.

Ahora ya en Montoro de la Mezquita, punto de partida para visitar las Pasarelas de Valloré construídas sobre el Río Guadalope.

Esta ruta fluvial inaugurada en otoño de 2017 no les ha durado ni tan siquiera un año ya que a últimos de junio de 2018 una fuerte riada arrasó gran parte de la infraestructura y pasarelas. Actualmente la ruta está cerrada con el consiguiente desastre económico para el pueblo.

De regreso a Pitarque al menos una docena de buitres leonados dándose un festín de cabra hispánica. Se pagan cifras desorbitadas por matar estos animales con el único beneficio de exhibir su cabeza disecada con sus grandes cornamentas en el salón de su casa. Es tremendo lo que hacen los humanos, esto no tiene remedio.

Martes día 26, Paquita nos prepara un buen desayuno, nos despedimos de ella y salimos hacia Albarracín por esta torcida y empinada carretera.

Nos llama la atención el Aeropuerto de Teruel con decenas de aviones aparcados y nos paramos para verlo más de cerca. Nos enteramos que se trata de la mayor plataforma de estacionamiento y mantenimiento de aeronaves de Europa.

Una vez en Albarracín, nos alojamos en Hotel-Mesón El Gallo (30 € s/des.) muy bien, barato y con parking.
Casa de la Julianeta, la humilde "torre de Pisa" de Albarracín. Data del s XIV.

Dicen que Albarracín es uno de los pueblos más bonitos de España y os aseguro que no les falta razón. Es Monumento Nacional desde 1961 y candidata de la UNESCO para ser declarada Patrimonio de la Humanidad.

Imagen de la Plaza Mayor donde radica el Ayuntamiento de la localidad.

Pasadizos, escalinatas, callejuelas... forman parte del entramado de esta población. 

Por la tarde hacemos el paseo fluvial por el río Guadalaviar, un bonito paseo por el meandro que describe el río a su paso por Albarracín y más o menos damos por terminada la visita y nuestras vacaciones.

Miércoles 27, para las 9,30 decimos adiós a esta maravillosa localidad y a estas vacaciones por las provincias de Alicante, Valencia y Teruel. Hemos disfrutado un montón, hemos caminado más que un montón y hemos tenido un tiempo demasiado bueno para lo que debiera de hacer en esta época en la que nos encontramos.

Ahora toca esperar de nuevo a nuestra próxima salida y destino.